domingo, 20 de agosto de 2017

AÑO 1836. DURANTE LA REGENCIA DE LA REINA MARÍA CRISTINA DE BORBÓN SE INAUGURA EL PRIMER RETRETE PÚBLICO, O CASINO, O COMÚN PÚBLICO, O URINARIO, O MICCIONARIO... DE ESPAÑA.


TEMAS QUE VAMOS A DESARROLLAR
Introducción.
• Desde hace más de 4000 años han existido retretes.
• ...Pero lo natural ha sido hacer las "necesidades" al aire libre.
• Implantación de vespasianas.
• La dificultad de mantener el decoro.
• No se mea donde hay una cruz.
• La calle como lugar para depositar los desechos.
• Ríos convertidos en cloacas.
El término retrete como habitáculo.
El término retrete como mueble.
El retrete real de Fernando VII en el museo del prado.
El primer retrete público contemporáneo de españa.
• Preámbulo.
• Todo se agilizó por el miedo al cólera morbo.
• El impulsor del primer retrete público en España fue D. Joaquín Vizcaíno, Marqués viudo de Pontejos, Alcalde de Madrid.
Relación de los descendientes de la Marquesa de Pontejos y Condesa de la Ventosa con los del Duque de Riánsares.
• ¿Cuándo se construyó el primer retrete público?
• Brevedad de este primer retrete público.
• Nuevos retretes públicos por todo Madrid: columnas o vespasianas.
Colofón curioso: el día mundial del retrete, 19 de noviembre.


INTRODUCCIÓN

DESDE HACE MÁS DE 4 000 AÑOS HAN EXISTIDO 'RETRETES'.

Retretes, como habitáculos y/o como mobiliarios, para defecar y/o miccionar. Los hubo en el valle del Indo: Lothal, Harappa, Mohenjo Daro..., en la antigua Mesopotamia, en las casas señoriales egipcias, en el palacio de Cnosos micénico, en los palacios de Pérgamo, en los baños públicos romanos...

EL ESPACIO OCUPADO POR ÉSTOS HA SIDO DESDE LO MÁS PÚBLICO A LO MÁS RESERVADO: en Roma se hacían las deyecciones y se miccionba en las letrinas públicas en alegre compañía y agradable conversación, convirtiéndose en un verdadero lugar de encuentro para estar a la última de los cotilleos de la ciudad. Y así como las letrinas romanas de los "castra" se ubicaban en el "común", luego las miserables letrinas medievales o excusados estarán empotradas o voladas contra el muro del castillo o sus defensas, donde el foso servía de receptáculo para las inmundicias. También las ciudades generarán dos espacios: uno externo, de encuentro acumulativo en las calles, que eran retirados periódicamente; otro privado, interno, en las casas (generando las "secretas" o "letrinas", primero en los corrales o patios con su correspondiente pozo ciego, y luego creando los "retretes"), de concentración y temporalidad limitada (diaria: con el "agua va" del bacín; o de algunos días con la consiguiente retirada por carros empleados para el propósito, transportándolo a los muladares).

[Cfr.: Werner, Florian. La materia oscura: historia cultural de la mierda. Barcelona: Tusquets, 2013.]

SU FORMA HA SIDO VARIABLE, aunque tendiendo siempre a buscar la postura antinatural de estar sentado, de ahí los bancos de piedra horadados y separados mediante apoyabrazos y con respaldos, más o menos labrados y embellecidos, inicialmente, y luego los muebles móviles a modo de sillones o tronas.

Esta postura, además, servía para realizar cualquiera de las dos actividades evacuatorias, tanto en los hombres como en las mujeres.

EN EL RENACIMIENTO SE IRÁN INDIVIDUALIZANDO, y comenzó un proceso de sustitución de esos asientos de piedra, colectivos en su mayoría, que se repitieron según el modelo de la Antigüedad, por un mueble individual, portátil, consistente primero en una caja de madera forrada o un armazón de hierro con cortinas que ocultaban el bacín, que ya se venía usando desde hacía siglos y luego en sillas o tronas (y quizá en esto se siguiera el modelo romano de la 'sella pertusa' de las casas romanas, o sillico o silla-retrete privada de los amos, distinta a las "sella familiaris" o "sella foricaria", que era la letrina doméstica de los siervos, aunque todas "perforata sella ad excipenda alvi excrementa accomodata"). Pero se desviaron en sofistificación y belleza, queriendo tapar, y con cubrimientos aterciopelados ocultar, el resultado de la actividad llevada a cabo por el usuario Tanto que, por ejemplo

«la corte de Francia contaba con un buen número de estos aparatos. La variedad de modelos y la diversidad de ornamentos se compadecía con los distintos nombres que recibieron: 'retrait' (retiros), 'chaises d'affaires' (sillas de asuntos o de quehaceres), 'chaises pertuisées' (sillas horadadas), 'chaises percées' (sillas perforadas), 'chayères de retrait' (asientos de retiro), 'chaises nécessaires' (sillas necesarias) o simplemente 'selles', vocablo que designa indistintamente al retrete y las heces».
[Prignano, Ángel Óscar. El inodoro y sus conexiones. La indiscreta historia del lugar de necesidad que, por común, excusado es nombrarlo. Buenos Aires: Biblos, 2007, pág. 32.]

Así, en el palacio de Versalles, durante el reinado de Luis XIV se contabilizaban más de 264 sillas-retretes móviles, celebrando el mismo audiencias sentado en ellas, como relata Louis de Rouvroy, duque de Saint-Simon, en sus "Memorias" [Mémoires complets et authentiques du duc de Saint-Simon sur le siècle de Louis XIV et la Régence. Paris: Hachette, 1856-1882], habiéndose creado desde el siglo XVII ex professo el cargo del "porte-Chaise d'Affaires" (porta- retrete móvil):

«Le porte chaise d'affaires était celui qui, le chapeau bas, en habit de velours, l'épée au flanc, était chargé de dissimuler ces dernières misères auxquelles il a plu à la mère nature de nous assujettir»,
(esto es,"el 'porta retrete móvil' era el que, vestido con sombrero, chaqueta de terciopelo y espada al flanco, se encargaba de ocultar las miserias pasadas con que ha complacido a la madre Naturaleza someternos").

[Cfr.: France d'Hézecques, Felix de. Souvenirs d'un page de la cour de Louis XVI. Paris: Didier, 1873, pág. 212].

Por cierto, que el duque de Saint-Simon, de su viaje a España, dejó mención de que

"sus majestades católicas [Felipe V de España e Isabel Farnesio] compartían siempre un mismo guardarropa, y allá donde fuesen viajan con ellos sus dos sillas-retrete, siempre una junto a otra".

Pérez Samper, Mª Ángeles (est. intr.). Saint-Simon en España. Memorias (junio 1721-abril-1722). Alicante: Univ. ALicante, 2008, pág. 325.]

Y semejante al Groom of the Stool‘(limpiaculos real) creado en Inglaterra por el rey Enrique VII (que perduró hasta 1901) será el "chevalier porte-coton" (caballeros porta-algodones).

[Cfr.: Newton, William Ritchey. La petite cour. Services et serviteurs à la Cour de Versailles au XVIIIe siècle. Paris: Fayard, 2006].

SE MULTIPLICARÁN LOS RETRETES PÚBLICOS EN LAS CIUDADES LUEGO, con la progresiva ascensión de la burguesía, "espacios de gestión de la basura corporal en los espacios urbanos", que se irán convirtiendo en cabinas vigilantes del género, acorde con el establecimiento de nuevos códigos conyugales y domésticos que exigen la redefinición espacial de los géneros. Así, olvidada esa costumbre "común", "social", de la Antigüedad, durante el siglo XX, los retretes se vuelven auténticas células públicas de inspección en las que se evalúa la adecuación de cada cuerpo con los códigos vigentes de la masculinidad y la feminidad: en la puerta de cada retrete, como único signo, una interpelación de género: masculino o femenino, damas o caballeros.

[Cfr.: Laporte, Dominique. Historia de la mierda. Valencia: Pre-Textos, 1998.]


Por ello, si analizamos el asunto detenidamente,

«Como dice Henri Lefebvre, el espacio, a pesar de su apariencia neutral, “viene a ser un instrumento político intencionalmente manipulado” [Lefebvre, H. Espacio y Política. Barcelona: Península, 1976, pág. 31] y su capacidad para ocultarse bajo una aparente universalidad le hace ser un estratega perfecto como dispositivo de verificación y regulación, una tecnología clave para la producción y recepción de los discursos identitarios de sexo-género, pues sigilosamente deviene en espacio de imposición y exclusión social».

[Cfr.: Río Almagro, Alfonso del. "Arte, cuerpos y aseos públicos. Estrategias artísticas de cuestionamiento de los dispositios arquitectónicos de segregación de sexo-género", in Política y Sociedad, LII, 2 (2015) pág. 467].

viernes, 18 de agosto de 2017

UN TATA-TATARANIETO DEL DUQUE DE RIÁNSARES Y LA REINA MARÍA CRISTINA DE BORBÓN, CONCEJAL DE UNIDOS PODEMOS DE TOLEDO.

Javier Mateo Álvarez de Toledo, candidato por Unidos Podemos de Toledo a la Alcaldía de Toledo en 2015, y actual Segundo Teniente de Alcalde y responsable de la Concejalía de Servicios Sociales, es tata-tataranieto del Duque de Riánsares y de la reina María Cristina de Borbón-Dos Sicilias, a través de su madre.

Hijo de Dª Elvira Álvarez de Toledo y Gómez-Trénor, y nieto de XII Conde de la Ventosa, D. José María Álvarez de Toledo y Mencos. Este abuelo suyo, fue a su vez biznieto de la hija del Duque de Riánsares y la reina Mª Cristina, Dª María Cristina Muñoz y Borbón, tal y como podemos observar en el siguiente árbol:



Asimismo, podemos ver en la otra línea de sus ascendientes, concretamente de la que ha conservado su segundo apellido, que es un miembro descendiente de la Casa de Medina-Sidonia.

El concejal de "Unidos Podemos de Toledo", y coordionador local desde 2014, estudió Geografía e Historia y tiene su puesto de trabajo en excedencia en Consuegra, como Animador Socio-Cultural y de Juventud, dentro del equipo de los Servicios Sociales de ese Ayuntamiento.

Como curiosidad, recordemos nuestra entrada en este blog, en la que hablábamos de que el actual Ministro deln Partido Popular, Íñigo Méndez de Vigo, es descendiente también del Duque de Riánsares y la reina María Cristina (cfr.: https://duquederiansares.blogspot.com.es/2015/08/inigo-mendez-de-vigo.html.

Javier Mateo Álvarez de Toeldo ha publicado junto a Luis Rodríguez Bausá “La vuelta a Toledo en 80 leyendas” (David Blázquez Comunicación S.L., 2007) y la “Guía mágica de Toledo y su provincia” (Toledo: Ed. Covarrubias, 2010).


WEBGRAFÍA.

http://www.ganemostoledo.org/javier-mateo-y-alvarez-de-toledo/

http://www.ganemostoledo.org/javier-mateo-alvarez-de-toledo/

http://www.toledo.es/corporacion/javier-mateo-alvarez-de-toledo/